dilluns, 7 de juny del 2010

DECLARACIÓN DE PROFESORES UNIVERSITARIOS FRENTE A LA CRISIS


Los profesores y profesoras universitarios que firmamos esta declaración lo
hacemos porque tenemos la convicción de que la interpretación que se hace de la crisis y
las medidas que se están tomando ante la grave situación que estamos viviendo no son las
adecuadas para hacerle frente respetando principios elementales de la democracia y la
justicia social.
Queremos que la ciudadanía entienda que esta crisis no es simplemente un hecho
circunstancial, sino la expresión de un modo de vida y de organización de todo el sistema
social y económico que es material y humanamente insostenible.
La crisis la ha provocado un sistema financiero concebido y regulado para que la
principal fuente de beneficio de la banca y los poderes financieros sea la especulación. Por
eso será imposible salir de la crisis como se quiere salir: sin cambiar las reglas del sistema
financiero, sin acabar con los paraísos fiscales, sin vigilar y controlar a la bancos y dejando
que sigan siendo ellos quienes impongan el modo de funcionar de la economía mundial.
No podemos consentir que la ciudadanía que nada ha tenido que ver pague los platos rotos
por los bancos.
La crisis ha tenido un efecto especialmente grave en nuestro país porque los
gobiernos consolidaron en los últimos años un modelo económico basado en la
construcción, en la explotación masiva e irracional de los recursos naturales y en la
desigualdad y muy dependiente de los designios de las grandes corporaciones y burocracias
europeas. No podremos salir de la crisis si se sigue incentivando el mismo tipo de actividad
económica.
También estamos comprobando que la crisis hace evidente la fragilidad de nuestra
democracia porque en lugar de la deliberación predomina la imposición y porque los
poderes financieros y económicos se imponen continuamente a las instituciones
representativas. Ceder a la extorsión de "los mercados" es debilitar aún más la democracia y
así solo se saldrá de la crisis con menos bienestar y justicia.
Se quiere hacer creer a la ciudadanía que las medidas que se están adoptando son las
únicas posibles pero la experiencia de otros países nos permite afirmar que eso no es
verdad y que cuando se adoptan solo conducen, como acaba de decir el premio Nobel de
Economía Joseph Stiglitz, "al desastre". Sabemos, por el contrario, que hay otras salidas a la
crisis mucho más eficaces y favorables para el bienestar.
El conocimiento de lo que está ocurriendo y el sentido común nos dicen que lo
primero y principal es devolver el crédito a empresas y familias y que para ello es necesario
que el Estado disponga de fuentes seguras de financiación. Es inmoral e inaceptable que el
dinero que los poderes públicos dan a los bancos al 1% para que financien a la economía
solo lo utilicen para comprar deuda pública al 5 o incluso al 10% o para seguir especulando.
Por eso defendemos la banca pública que la crisis ha demostrado que es más necesaria que
nunca.
Sabemos que la reforma laboral que se prepara solo con el propósito principal de
debilitar el poder de negociación de los trabajadores no es lo que se necesita para crear
empleo. Tratar de salir de la crisis reduciendo los salarios y las rentas de la mayoría de la
población es como querer salir del hoyo tirándose de los pelos. Son esas rentas quienes
mantienen el gasto que permite que la economía se mantenga en pie, de modo que
reducirlas para aumentar los beneficios de los bancos y las grandes empresas (que en el
primer trimestre de 2010 han aumentado un 25%) es la antesala de una larga y dolorosa
depresión económica.
Sabemos que los recortes de gasto público que se proponen no son los más eficaces
ni los más justos y que, en todo caso, hay otros que se podrían haber recortado primero,
como los militares. Y sabemos que existen otros mecanismos de obtención de ingresos
cuya carga no recae sobre los más desfavorecidos sino sobre aquellos que provocaron la
crisis, o sobre los que disfrutan de ingresos o riqueza muy superiores a la mayoría de la
población.
Quienes conocemos cómo funciona esta sociedad, la historia y la naturaleza de los
auténticos poderes que toman las decisiones somos conscientes de la dificultad de tomar
hoy día medidas diferentes a las que proponen la patronal y los grandes financieros. Pero la
experiencia también nos enseña que cuando la ciudadanía se empodera y conoce bien lo
que pasa a su alrededor es capaz de influir y de torcer las decisiones que le obligan a ir por
los caminos que no desea transitar.
Por ello reclamamos también más debate y diálogo social para que la ciudadanía
sepa lo que pasa, para que disponga de información plural y pueda optar y decidir con
fundamento. Reclamamos, por tanto, que los medios de comunicación públicos cumplan
con la tarea a la que están llamados y abran urgentemente debates sobre la crisis en los que
no se difundan siempre las mismas ideas de quienes detentan el poder sino las diferentes
concepciones y propuestas sobre lo que está ocurriendo y sobre la mejor forma de hacerle
frente.
Con este convencimiento, nos comprometemos a contribuir con nuestra actividad
universitaria para que la sociedad tome conciencia de que las medidas que se están
adoptando NO PERMITIRÁN RESOLVER LA CRISIS porque solo se encaminan a
facilitar que los de por sí más privilegiados obtengan más cómodamente sus enormes
beneficios. Y, sobre todo, a aportar y difundir esas OTRAS FORMAS DE HACER
FRENTE A LA CRISIS que respetan el bienestar y la justicia y que además son mucho
más eficaces para combatir sus efectos tan negativas sobre la población más desfavorecida.
Como muestra de este compromiso suscribimos esta declaración que haremos
pública próximamente para mostrar nuestro rechazo a las medidas que se vienen
adoptando.
Sevilla, mayo de 2010
Primeros firmantes
Juan Torres López, Catedrático de Economía Aplicada, U. de Sevilla
Esther Velázquez Alonso, Profesora de Economía Aplicada, U. Pablo de Olavide
Catalina Lara, Catedrática Bioquímica y Biol. Molecular, U. de Sevilla
Alfredo Serrano Mancilla, Profesor de Economía Aplicada, U. Pablo de Olavide
Manuel Delgado Cabeza, Catedrático de Economía Aplicada, U. de Sevilla
Lina Gálvez Muñoz Profesora Titular de Hist. e Instit. Económicas, U. Pablo de Olavide
Luis Andrés Zambrana, Profesor de Economía Aplicada, U. de Sevilla
Francisco Sierra Caballero, Catedrático de Comunicación Audiovisual, U. de Sevilla
Rafael Gómez Gordillo, Profesor de Derecho del Trabajo, U. Pablo de Olavide
Susana Moreno Maestro, Ayudante Dpto. Antropología Social, U. de Sevilla
Carolina Márquez Guerrero, Profesora Titular de Economía Aplicada, U. de Sevilla
Rosa Ma Díaz Jiménez, Profesora de Trabajo Social, U. Pablo de Olavide
Maria Jose Lera Rodriguez, Profesora Titular de Psicología Evolutiva. U de Sevilla
Aurora Labio Bernal, Profesora Titular de Periodismo, U. de Sevilla
Raquel Rico Linage, Profesora de Derecho, U. de Sevilla
Antonia Corona Agula, Profesora de Trabajo Social, U. Pablo de Olavide
Miguel Vázquez Liñán, Departamento de Periodismo 1, U. de Sevilla
Mauricio Matus López, Dto. Economía, U. Pablo de Olavide
Esteban de Manuel Jerez, Prof. E.T.S. Arquitectura, U. de Sevilla
Ricardo Marqués, Dt. de Electrónica y Electromagnetismo, U. de Sevilla
Marta Soler Montiel, Profesora de Economía Aplicada, U. de Sevilla
Raquel Guzmán Ordaz, Dto. Sociología, U. de Sevilla
Inmaculada Sánchez Márquez, Profesora de Trabajo Social, U. Pablo de Olavide
Lucía del Moral Espín, Becaria FPU, Dto. Economía, U. Pablo de Olavide
María Luisa Jiménez Rodrigo, Profesora de Sociología, U. de Sevilla
José Luis Malagón Bernal, Catedrático de E.U. de Trabajo Social, U. Pablo de Olavide

2 comentaris:

  1. Muy buena esta declaración. Ojalá llegue a buen puerto y se tomen las medidas más adecuadas para salir de este embrollo al que nos han metido, aunque me temo que a los poderes públicos no les interesa que esto ocurra, pues lo único que les importa es seguir enriqueciéndose a costa de lo que sea y de quien sea (en este caso y como siempre, de los proletariados)
    Solo espero y deseo que algún día seamos capaces de unirnos todos y luchar contra tanta injusticia y logremos cambiar las cosas.

    Un abrazo, y... cuenta conmigo ;)

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  2. Encontré esta entrada porque buscaba en Google a la Dra. Raquel Guzmán Ordaz, quien fue mi profesora de historia en la secundaria hace diez años en México. Soy Alexandra Villavicencio, ella es un ejemplo a seguir para mí por lo que me gustaría reestablecer contacto con ella. Veo que firma esta declaración. Agradeceré me pongan en contacto. Mi correo electrónico es alexvillavicastel@hotmail.com. Muchas gracias.

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