divendres, 13 de març del 2009

Quintín Cabrera. Cony no parem de morts, ja !!Nooo?

Passejavem Quintín per la plaça de Catalunya, tu ja anaves i venies de Madrid, i em cantussejaves que "las ciudades son los libros que se leen con los pies" quan em queixava que estava fart de Barcelona, veniem d'una presentació d'en Miquel Pujadó. Estudiaves periodisme i em sorprenia el teu optimisme, les teves ganes de brega. Eres un home bondadós i molt curiós, recordo que em vas fer del PSUC sense ni demanar-me permis, un dia em vas donar el carnet en un bar del darrera de l'escola industrial...( mai vaig pagar la quota Quintin , ho sento, soc un descregut, però, t'agraeixo la bona intenció de convertir-me). Els d'Edigsa, ens varen fotre una putada majuscula, he, Quintín? A tu i a mi i al bonàs de l'Oriol Tramvia. No varen complir amb els contractes i ens varen matar una mica més de gana, que no pas de desesperança. Encara que fes, l'esperança, com sempre, de mal esperar. Estic fart de morts, Quintín!! Estic fart de que et moris!!Cony!

Com que els de You Tube han tret el video de la Cançó "Yo nací en Montevideo" us poso la lletra d'aquesta endementres la busco ... esteee...

Las ciudades son libros

(Quintín Cabrera)

De mañana se visten
de pan y ruidos nuevos,
de sol al mediodía,
por las tardes café.
Su corazón enseñan
tan solo por las noches
mintiendo a los turistas
pues no les quieren bien.
Las ciudades son libros
que se leen con los pies.

Se prestan pedacitos
preciados del paisaje,
esquinas y detalles,
a veces un cartel.
El color de los taxis
puede ser una clave,
un guiño hacia el viajero
si este lo quiere ver.
Las ciudades son libros
que se leen con los pies.

La magia de Estocolmo
lleno de primavera
está en Río de Janeiro
vaya a saber por qué.
Lo seguiré diciendo
aunque nadie lo crea
hay zonas de Getafe
que son de Hospitalet.
Las ciudades son libros
que se leen con los pies.

Su soledad comienza
en un túnel de metro
y en manos apretadas,
la solidaridad;
el patio en las escuelas
les da juegos y risas
y amargo gesto toman
en salas de hospital.
Las ciudades son libros
que se leen con los pies.

La luna más hermosa
y grande que yo he visto
comparten Carcassonne
y Cuenca, bien lo sé,
Puerto de Santa María
las chicas más bonitas
paseando por sus calles
igual que Montpellier.
Las ciudades son libros
que se leen con los pies.

Baldosa por baldosa
busco a Montevideo
por silencios nocturnos
y en mesas de cafés;
montones de basura
vigilan las esquinas:
el "viejito" Frugoni
tenía razón, ya ven.
Las ciudades son libros
que se leen con los pies.